Y aquà de nuevo compartiendo con ustedes, celebré mi primer mes fuera de casa con una caminata, un mes diferente, lleno de sueños cumplidos, y muchas sorpresas, mi primer mes lejos de mi familia y de todos aquellos que quiero. Mis padres nunca me inculcaron viajar ni nada por el estilo, eso si, me inculcaron creer en Dios, ser buena persona y que de todo lo mejor de mi cada vez que emprenda algo. Sin embargo siempre he sentido que una parte de mi es aventurera, la cual me hacÃa preguntar que habÃa más allá de lo que no conozco, como serÃa ver el atardecer y amanecer desde otros lugares, como se sentirÃa estar en un lugar diferente, y asà pensando que el mundo es un lugar increÃble, diverso y encantador y yo solo conozco una pequeñÃsima porción, pero está el miedo, la zona de confort, el dinero, el tiempo, las incomodidades (y un montón de excusas más) que no me permitÃan ver las posibilidades y los medios para lograr lo que tanto soñaba, deseaba tanto salir y emprender una aventura, cambiar de ambiente, que en menos de lo que pensé ya estaba tomando un avión haciendo realidad mi sueño, lo difÃcil era ese primer paso, y yo ya lo habÃa dado, no lo podÃa creer, ya era realidad aquello que veÃa imposible, recuerdo que lloré una hora sola sentada en la silla del avión, estaba conmovida, alegre, nostálgica, asombrada, mejor dicho era un manojo de sentimientos, parecÃa una fantasÃa, veÃa tan lejano lo que estaba sucediendo que no entendÃa bien todo lo que sentÃa, y verme aquÃ, ya es un mes fuera de casa, extrañando todo lo que conozco, pero con mas ganas de vivir y explorar todo lo que no conozco, gracias a Dios estoy feliz, di con personas buenas, comprensibles que me acogieron con gran amabilidad. Asà que por favor, no renuncies a tus sueños.
Haz que suceda más temprano que tarde. Porque, sinceramente, el tiempo para hacerlo es AHORA. Y sólo tenemos una VIDA. Tei. 🌻